La Libertad de Prensa en tiempos de la 4T

General Opinión

La Libertad de Prensa en tiempos de la 4T

 

La Libertad de Prensa en tiempos de la 4T

*El ejercicio de la libertad de prensa no es una concesión de los gobernantes, sino un derecho ganado a los largo de la historia del periodismo, fruto de la persecución, la censura, amenaza e incluso muerte de los profesionales de la pluma

*El tiempos de la 4T, el derecho de réplica del Presidente López, ha sido un ejercicio para denostar a la prensa crítica que no aplaude todas sus acciones de gobierno

 /Por Ricardo Contreras Reyes/
        /Especial de Pasaporte Informativo/

Este 7 de junio se conmemoró el Día de la Libertad de Prensa en México.

Desde 1951, durante el sexenio del Presidente Miguel Alemán Valdés, directores de los principales diarios y revistas de la capital del país organizaban una comida para rendirle homenaje al Primer Mandatario en agradecimiento “por hacer posible el ejercicio de la libertad de prensa”.

Los periódicos y revistas en ese entonces eran presionados editorialmente porque el Gobierno era el único proveedor de papel y los que se excedían en sus críticas, les cancelaban el suministro de papel.

El Gobierno ejercía un fuerte control sobre los contenidos, había censura y mucha autocensura.

Rafael Rodríguez Castañeda en su libro “Prensa Vendida”, nos cuenta de la estrecha relación que existía entre los Medios de Comunicación y el Gobierno Federal.

A largo de los sexenios priístas, ésta perversa relación, permitía al Gobierno Federal un control estricto, basado en prebendas, arreglos publicitarios y silencios cómplices.

Carlos Denegri, periodista de Excélsior es un claro ejemplo de la prensa al servicio del poder.

Cuando llega Vicente Fox al poder las reglas cambiaron. El gobierno cambió la fecha del festejo al 3 de
Mayo y prometió la ciudadanización del Premio Nacional de Periodismo.

Pero el ejercicio de la libertad de prensa no es una concesión de los gobernantes, sino un derecho ganado a lo largo de la historia del periodismo, fruto de la persecución , censura, amenaza e incluso muerte de los profesionales de la pluma.

Por eso llama la atención la actitud del Presidente López hacia la prensa crítica.

En días pasados dijo que eran tiempo de definiciones “o están con la 4T o están en contra”.

Y todo indica que la advertencia incluye a la prensa.

En las mañaneras, desde el púlpito presidencial, López ejerce “su derecho de réplica” para denostar a la prensa fifí, chayotera y conservadora.

Los nuevos tiempos de libertad podrían nublarse si el gremio permite la ofensa y la descalificación sean parte de la normalidad.

Quizás sea tiempo para reflexionar sobre cuál será el rol de la prensa libre ante los embates oficiales que buscan acallar la verdad.

De lo contrario, la realidad podría repetir el histórico ritual servil ante el Gran Tlatoani.

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