Luis González Obregón, un escritor visto en el siglo XXI

General Historia y Leyendas

Luis González Obregón, un escritor visto en el siglo XXI

Luis González Obregón, un escritor visto en el siglo XXI

Por Osmand Romero

Lic. en Historia

 

 

 

Luis González Obregón (1865-1938) Es aquel historiador decimonónico nacido en los primeros cincuenta años de nación independiente, en medio de una de las tantas intervenciones extranjeras y uno de los dos imperios efímeros que tuvo la nación mexicana. Logra generar su propia esencia a finales de ese siglo. Buscó a través de los archivos completamente desconocidos para aquel entonces una explicación de los sucesos y tradiciones más antiguas de aquella ciudad fundada y refundada por dos culturas distintas.

Después de lo anteriormente mencionado se puede decir que es historia, pero no es aquella historia patria de comienzos de su siglo el cual comienza con el pueblo de Dolores. Esto lo logra realizar a través de una de sus obras que es hoy en día esencial para conocer la transformación de esa gran ciudad capital, a través de trescientos años de extensa historia, esta lleva por nombre México Viejo y este nombre no es de exagerar, ya que conforme pasa el tiempo y la urbanización de aquella ciudad este libro envejece más, pero es un renuevo y cambio de paradigma para aquellos que lo leen por primera vez, ya que es citado como una fuente de primera mano en investigaciones históricas de esta gran ciudad.

Se transporta más allá, cuando los grandes templos estaban recientemente derribados y solo quedaban los cimientos de aquella magnificencia aliancista de esas tres ciudades destruidas.

Se podía aun recordar aquellos cuerpos de soldados de ambos bandos expuestos y extendidos por las avenidas. Los sobrevivientes estaban siendo sometidos por sus nuevos amos, recibiendo ordenes para construir edificios de gusto y estilo arquitectónico completamente distintos a los acostumbrados a ver por parte de los recién esclavizados.

Describe los primeros planos de aquellas construcciones nacidas en los primeros años de la fundación que con el paso del tiempo fueron modificadas en su gran totalidad, destruidas por terremotos e inundaciones y olvidadas por el tiempo. Casas y edificios que cumplían una función en específico, que al pasar de los años estos  comenzaron a cumplir otro papel muy distinto al original, las cuales fueron observadas directamente por el maestro Luis, porque al ya no funcionar como lo fue en sus primeros siglos de vida, estas fueron y en varios casos siguen siendo ocupados por diferentes motivos; a su vez muchos se les ha perdido la pista de donde solían estar, ya que solo son mencionados, su localización esta poco clara, ya que la fachada y el número no coinciden con las que quedan en pie todavía.

Se conoce claramente de las ordenes religiosas principales que llegaron a Nueva España para forjar el proceso de evangelización, pero poco se sabe de esas ordenes de menor tamaño y numero de feligreses que este llegaron directamente a la ciudad, aquellas que de ciudades americanas recién fundadas distantes probaron suerte en aquella desconocida y enorme metrópoli así también su breve instancia, ideología, acciones y riqueza arquitectónica.

Los personajes que se hablan en la obra son tan bien documentados, como populares hoy en día que su historia bien narrada ha pasado de ser de un trabajo bibliográfico, que hoy en día se transmite de boca en boca, que no pierde la esencia que dejó como herencia González Obregón. cabe recalcar el rescate de figuras históricas que tuvieron un papel verdaderamente importantísimo, quitando el mito para hacerlo lo mas real posible a través de sus hechos.

 

Festejos y tradiciones son relatados, su color, su olor y tradición son descritos tan bellamente que no es difícil imaginar estar presente en ese lugar. Lugar que recibe ese nombre tan especial, porque ahí se realizó aquel acto tan particular, dejando una esencia propia que aun podemos escuchar ser nombrada de esa manera, aunque hoy en día ya no tenga esa función o haya cambiado completamente el paisaje.

Para poder complementar la información que brinda de una manera detallada, México Viejo está compuesto de herramientas visuales que facilitan más aun el disfrutar de la lectura, tal como son los planos arquitectónicos de iglesias barrocas en gran parte, edificios, cuadros de interiores de edificios que ya no sobrevivieron a los distintos procesos históricos, retratos de personajes poco conocidos o retratos poco conocidos de personajes populares que comparte con sus lectores el maestro Luis, que han sido tomados para ilustrar obras posteriores.

Gracias a este gran esfuerzo realizado por González Obregón se ha ganado al paso de los años en tener el lugar de Cronista de la Ciudad de México, el cual ocupa el lugar de ser el primero de una larga cadena de lectores e investigadores. Su pluma sirvió de inspiración para que muchos letrados siguieran investigando sobre esta gran ciudad, como es el caso de Valle Arizpe que captura la personificación de personajes populares y cotidianos de la época. Incluso ha impulsado a investigar temas poco o nada conocidos como es el caso de Carlos J. Sierra con su libro titulado Historia de la Navegación en México. También la figura de Luis González Obregón ha sido objeto de estudio por el simple hecho de ser el, como el caso del libro Cronistas de la Ciudad de México de Luis Rublúo, dedicándole un espacio muy especial en su obra.

 

Quien tenga interés por conocer la historia de esta gran ciudad, el lector esta obligado a leer, no porque sea forzoso, es para comprender la evolución de tan importante espacio para los mexicanos. Es un libro que marca el inicio del siglo XX hacia un

México en vías de transformación a la modernidad, pasando casi de inmediato a una etapa revolucionaria que en ella nacerán otra gran línea de escritores de varios géneros.

Ahora a mas de 125 años de su primera publicación podemos mencionar que es un libro que vale bien la pena buscar hasta encontrar, ya que es complicado encontrarlo, pero cuando lo encuentres permíteme decir un punto de vista personal: Es uno de los mejores libros que leerás. No te cansas de hacerlo, es ameno, interesante y te vas apasionando capítulo a capítulo. Son de aquellos que debes de leer despacio para irlo disfrutando, para que no se termine tan pronto porque el paso de las páginas no se

siente cuando disfrutas de esta obra maestra.

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