¡ROSARIAZO¡
Por: Moises Sanchez Limon 
>> Del cielo al infierno; desvelada y sujeta a proceso, Rosario Robles ingresó al Penal Femenil de Santa Martha Acatitla para cumplir dos meses de prisión preventiva
>> Cumplido el estilo justiciero del presidente López Obrador y su deslinde “no es asunto nuestro y tampoco soy Poncio Pilatos”. Hace poco dijo que Rosario es chivo expiatorio porque hay más involucrados en el caso de la “estafa maestra”
Por: Moisés Sánchez Limón
Ciudad de México, 13 de agosto (entresemana.mx). Rosario Robles sollozó cuando el juez la vinculó a proceso y le dictó dos meses de prisión preventiva justificada en el penal femenil de Santa Martha Acatitla, al que ingresó poco después de las ocho de la mañana de este martes.
En la orfandad política y sin aquel manto del “Rosario no te preocupes” del entonces presidente Enrique Peña Nieto, Robles Berlanga cumple la parte que le corresponde en el acto justiciero de la administración de López Obrador quien, hace unos días, la consideró chivo expiatorio en una discreta cuanto más indicativa de un acto justiciero no de justicia.
Incluso, poco después, quien fuera amigo de la hoy indiciada, el compañero de partido que recibió todo el apoyo de ella en su carrera en pos de la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México y de la Presidencia de la República, Andrés Manuel pretendió marginarse de este proceso jurisdiccional que tiene todos los elementos de este arranque sexenal de los tiempos priistas.
Así, cuando Rosario se aprestaba a instalarse lo mejor cómodo que se puede en una celda del penal de Santa Martha, en la conferencia de prensa mañanera se deslindó del caso de quien fuera poderosa jefa de Gobierno de la capital del país, dirigente del PRD e influyente integrante del gabinete del priista Enrique Peña Nieto.
López Obrador dijo que será el juez quien resolverá en definitiva la situación de Rosario e incluso si llama a declarar a más personas, en alusión a quienes ha mencionado Rosario de haber sido enterados de los malos manejos presupuestales que encontró al llegar a la Sedesol y la Sedatu, en específico a Peña Nieto y el ex candidato presidencial José Antonio Meade, amén de que en la llamada “estafa maestra” Emilio Zebadúa está involucrado toda vez que fue oficial mayor en la gestión de Robles Berlanga en ambas dependencias.
¿Justicia? ¿El debido proceso? ¿Cobro de factura al régimen Peña Nieto? Nada, el presidente López Obrador calificó al caso Robles Berlanga como un logro “el que no haya impunidad, el que exista un auténtico Estado de derecho, no como antes, que era un Estado de cohecho”.
Sostuvo que “no es un asunto nuestro” el de Rosario e incluso, fiel a su praxis discursiva asumió el papel: “tampoco soy Poncio Pilatos”. E insistió en la autonomía de la Fiscalía General de la República y del Poder Judicial de la Federación, y refirió que será el juez quien decidirá si declara formalmente presa a Robles Berlanga.
El amanecer de un martes 13…
Y si López Obrador se deslinda del caso y rechaza que sea un ajuste de cuentas, del ámbito de Peña Nieto e silencio ha sido la postura, mientras al amanecer de este cabalístico martes 13 la suerte de Rosario se encaminó a la prisión.
Y, después de las 8 de la mañana a ex integrante del gabinete presidencial, a bordo de una camioneta ingresó al penal de Santa Martha Acatitla, vinculada a proceso por ejercicio indebido del servicio público, Por riesgo de fuga, e juez de la causa le dictó prisión preventiva oficiosa,
La colega Gloria Islas Rodríguez, reportera de Notimex informó puntualmente que un juez vinculó a proceso a Rosario Robles Berlanga por uso indebido del servicio público cuando estuvo frente de la Sedatu y la Sedesol, y ordenó dos meses de prisión preventiva justificada en el penal de Santa Martha Acatitla para que se concluya la investigación complementaria.
Tras una audiencia maratónica de más de 12 horas, el juez de control Felipe de Jesús Delgadillo Padierna determinó aplicar el delito como agravado por haber sido continuo en prácticamente todo el sexenio pasado.
La Fiscalía General de la República (FGR) imputó a Robles como responsable por omisión del desvío de más de cinco mil 73 millones de pesos en contra del erario cuando estuvo al frente en la secretarías de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) y Desarrollo Social (Sedesol).
El juez dio un plazo de dos meses a la FGR para la conclusión de la investigación complementaria, pero, en caso de necesitar más tiempo, podrá solicitarlo.
El agente del Ministerio Público federal solicitaba seis meses de prisión preventiva justificada argumentando riesgo de que la exfuncionaria se sustraiga de la justicia, por no haber demostrado arraigo en la Ciudad de México, entre otras razones.
Advirtieron que las conductas de la exsecretaria de Estado podrían alcanzar una pena máxima por 23 años de prisión, además de que el hecho de reponer más de cinco mil millones de pesos es prácticamente imposible.
Con voz entrecortada por sollozos que intentó disimular, Rosario Robles Berlanga pidió al juez seguir el proceso en libertad y no en prisión justificada. Recordó que se ha presentado de manera voluntaria y que estaba fuera del país, pero regresó para enfrentar el proceso que se le sigue.
Puntualizó que desde hace 24 años viven la misma casa y que es “una mujer que he vivido de mi trabajo». Rechazó que en su caso haya riesgo de fuga.
Insistió en que siempre ha luchado por el debido proceso, por la presunción de inocencia. “Entiendo el apetito del Ministerio Público, porque varios que han querido procesar están sustraídos de la justicia”, acotó
Dijo que no tiene los millones de pesos para irse a vivir a Canadá y luego de regresar a México, pero el juez federal determinó la medida cautelar de prisión preventiva justificada, para evitar una posible fuga durante el tiempo que dure el proceso de Rosario Robles.
La acusación contra Robles Berlanga derivó de la investigación de la FGR relacionada a supuestos desvíos por 5 mil 073 millones de pesos, cometidos en las secretarías de Desarrollo Social (Sedesol) y de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) cuando Robles era titular.
La FGR aseguró en la audiencia, que inició la tarde del lunes 12 de agosto, que Robles sabía que en ambas dependencias funcionarios a su cargo cometían irregularidades en la contratación directa de entes públicos pero que no hizo nada para evitarlo ni lo informó al entonces presidente Enrique Peña Nieto.
La defensa de Robles Berlanga sostuvo que el entonces presidente Peña Nieto tuvo conocimiento de las irregularidades detectadas por la Auditoría Superior de la Federación durante su gestión al frente de la Secretaría de Desarrollo Social.
Nombres, nombres, nombres…
En este caso fue mencionado el excandidato presidencial José Antonio Meade quien, de acuerdo con la declaración de Robles supo de las anomalías presupuestales en la Secretaría de Desarrollo Social.
Incluso, Felipe de Jesús, abogado de Robles Berlanga reveló que cuando su cliente entrega la dependencia a Meade en agosto de 2015, le informó que estaban abiertas algunas observaciones de la ASF y debían solventarse de acuerdo con el procedimiento en estos casos. “Se le informó al nuevo secretario, ya no eran atribuibles a Rosario Robles”, enfatizó.
Y rechazó que su cliente hubiera sido omisa, por lo que presentaron 32 datos de prueba, entre ellos, oficios, declaraciones de testigos, dictámenes periciales en contabilidad y la propia declaración de su defendida.
Pero, hoy se cumplió la acción justiciera que ha sido praxis política en el cobro de facturas. Y se aplicó el Rosariazo. Robles Berlanga en manos de la justicia. ¿No te preocupes Rosario?
Con información de Notimex